La mítica firma italiana Fantic resucita el modelo Caballero, esta vez, enmarcándolo en el segmento scrambler.
El último Salón Internacional de Milán (2016) fue testigo de la renovación de uno de los modelos más carismáticos de la firma de Barzago, la Fantic Caballero. He de reconocer que en un principio no me convenció del todo el que re utilizasen la denominación Caballero, con un innegable pedigrí endurero, para un modelo de estas características. Sin embargo, poco a poco he valorado la apuesta de la hacienda italiana, tanto por la calidad que desprende el nuevo modelo, como por su capacidad de adaptarse a las últimas tendencias. No obstante, si nos remontamos hasta 1969, momento en el que aparece en escena la primera Caballero de 50cc en el Salón de Milán, veremos que Fantic la presentó en sociedad como un modelo scrambler.
Cuarenta y siete años después de aquella presentación, y tras una larga experiencia en competiciones de off road, la nueva Fantic Caballero renace con una estética absolutamente setentera y dirigida a un uso mixto. Equipada con un chasis fabricado en acero al cromo molibdeno, monta una horquilla invertida Paioli de 41mm delante, y un único amortiguador en la parte trasera anclado a un basculante de aluminio. Equipo de frenos Brembo en ambos trenes, con una pinza de anclaje radial delante y discos lobulados, llantas de radios y neumáticos “de tacos”.
Aunque su comercialización no está todavía confirmada (todo apunta a que si), estará propulsada por un motor monocilíndrico, disponible en tres versiones 125, 250 y 500 cc, este último refrigerado por agua, con un único árbol de levas, que ofrecerá 43 CV de potencia. Un escape con doble salida por el flanco derecho, firmado por Arrow, otorga gran parte de la personalidad a la scrambler transalpina.
Además, siguiendo las tendencias actuales, Fantic re aprovecha la base para desdoblar el modelo en una opción más asfáltica denominada Flat Track, con ligeros cambios en la carrocería, neumáticos mixtos y, personalmente, algo menos atractiva.
Ahora solo nos queda esperar a que se confirme su salida al mercado y, con un poco de suerte, que no cambien ni un ápice el diseño propuesto.